Funcionarios estadounidenses e israelíes temen que la mayoría de las personas secuestradas en Gaza hayan muerto en cautiverio. Lo informó este jueves The Wall Street Journal.

Según el reporte, las sospechas apuntan a que algunos rehenes murieron en los bombardeos israelíes, otros por problemas de salud y muchos tras ser utilizados “como escudos humanos” en los túneles construidos por las facciones armadas palestinas en la Franja de Gaza.

El reporte se conoció en medio de las negociaciones en curso en El Cairo para lograr un cese el fuego y un acuerdo para la liberación de los cautivos. El 7 de octubre, Hamas y otros grupos armados palestinos masacraron a 1200 personas y secuestraron a otras 240. Tras un acuerdo temporal, a fines de noviembre fueron liberadas más de un centenar, en medio de una ofensiva israelí que causó más de 33.000 muertos, según fuentes gazatíes.

Cuántas personas secuestradas quedan en poder de Hamas

Las Fuerzas de Defensa de Israel confirmaron la muerte de 34 de los alrededor de 130 rehenes que quedan aún en Gaza, ocho de ellos argentinos, en base a fuentes de inteligencia y hallazgos sobre el terreno, reportó The Israel Times.

Pero el informe del periódico estadounidense señaló que “funcionarios israelíes y estadounidenses estiman en privado que el número de muertes podría ser mucho más alto”.

“Algunas estimaciones estadounidenses indican que la mayoría de los rehenes ya están muertos”, dijeron funcionarios estadounidenses citados por el diario.

Las autoridades norteamericanas creen que los rehenes que aún están vivos están siendo utilizados como escudos humanos rodeando a los líderes de Hamas, escondidos en los túneles que todavía siguen en pie en Gaza.

Según el Canal 12 israelí, el jefe del Mossad, David Barnea, el principal funcionario de Israel involucrado en las negociaciones, les dijo a los ministros del gabinete que liberar a todos los cautivos en un único acuerdo de tregua sería imposible.

En el mejor de los casos, señaló, 40 personas podrían ser liberadas en una primera fase.